Cuantas veces hemos oido hablar del cielo, ese cielo donde existen los angeles, ese lugar donde todo es hermandad, solidaridad...en fin, todo es amor en su mas grande expresión. Un cielo donde no existen las emociones como aquí las entendemos, solo hay amor incondicional y en el florecen la alegria, la bondad, la humildad y la comprensión hacia los demas. Allí no hay espacio para los juicios, los rencores, las diferencias, las fustraciones y ninguno de esos "sentimientos" que nos puedan hacer sentirnos mal, allí donde todo es amor nada mas hay, no existe...simplemente no es.
En ese cielo la esencia, el alma, el espiritu, llamalo como quieras, de cada uno de nosotros brilla con todo su explendor, irradiando todo lo bueno, lo divino que nos hace ser como realmente somos...no como creemos ser, puede que unos brillen mas y otros no tanto, pero puedes estar seguro de que nadie deja de brillar.
Aquí, en esta maravillosas tierra, siempre se nos dijo que para llegar al cielo tenias que ser bueno, dando a entender que si te portabas bien irias a otro sitio, a la casa de los angeles...al cielo que de otra forma no alcanzarias. Ahora...en estos momentos, la verdad está ganando espacio a la ilusión, y cada dia mas y mas gente se pregunta que hacemos aquí y empieza su busqueda de ese amor incondicional, pues se va viendo que es el unico camino a la verdad.
Así estamos cada uno frente a su escalera individual y personalizada, quizás por uno mismo, que lleva al cielo. Cada uno de los millones de seres que estamos aquí puede encontrarse en diferente escalón, ni mejor ni peor, solo cada uno avanza en la medida que sus posibilidades le permiten entregarse.
La cuestión es que esa escalera no asciende ni desciende a ninguna parte, cada peldaño de esa escalera va encaminado al interior...al centro mismo de cada ser, directo al corazón...hogar del amor...al cielo mismo.
Cada cual en su viaje por esa escalera irá teniendo experiencias que le pueden hacer avanzar, pararse e incluso retroceder...depende de la voluntad de uno y su poder de elección decidir cuales son las cosas que crea necesitar en cada momento, abriendo puertas tras las cuales hay preciados tesoros, pequeños milagros....o abriendo aquellas que guardan obstaculos tales como el miedo, el desamor, la incomprensión, etc....La buena elección depende de lo consciente que seas cuando te enfrentas a unas u otras.
Expresando mi experiencia personal, por supuesto diferente para cada uno, puedo decir que abrí todas las puertas, tanto las que me hacian avanzar como aquellas que me hacian retroceder, como nó....no me dejé ni una por abrir, todo ello no siendo consciente de que era yo el que las abria...y así me iba...no entendia nada.
Ahora, pasados unos años, estoy en un momento crucial de esta vida, voy aprendiendo a diferenciar las puertas y cada vez intento abrir menos las que me puedan bloquear.
Como algunos de vosotros ya sabeis, por que lo sentisteis en primera persona, hace ahora casi un año casi pude llegar a la puerta del cielo, mejor dicho llegué pero no la cruzé, todo lo que sentí sin haberla cruzado, tan solo estando ante ella jamas podia explicarlo...haceroslo saber a traves de las palabras...mucho...muchisimo amor y comprensión hacia mis hermanos...no puedo siquiera imaginar que hubiese sentido si alcanzo a cruzar el umbral de aquella puerta.
Así, creyendo que era allí donde tenia que llegar, me relajé...di por hecho todo y sin darme cuenta empezé un camino en dirección contraria, hacia afuera, abriendo mas puertas que me alejaban de mi cielo...de mi corazón. Ni que decir que no era consciente de ello. Algo no está bien me digo ahora, debe haber algo que me he saltado, algo muy importante y que me impidió en su momento pasar al otro lado. Así me pongo a la busqueda de la raiz, no de la causa que esa ya la conozco, si no de aquello que tu no sabes, nadie sabe que está...pero influye. Preguntas, respuestas, interrogantes sin salida...pero de pronto, ese gran espiritu que vela por todos nosotros te lleva al entendimiento, empiezas a recibir mensajes...ver señales....suceden cosas que no puedes pasar por alto y todo ello te trae la respuesta.
Desde el momento en que empiezas a entender porque suceden las cosas en tu vida, alcanzas el punto de retorno, das la vuelta y coges dirección al cielo otra vez, solo que esta vez habrás visto la raiz, has enfrentado aquello que te hizo descender y lo dejas al pié de la escalera, perdonando se lo ofrececes al espiritu para que lo sane y emprendes tu camino de regreso. Volverás a pasar por las puertas que ahora ves difrentes y paso a paso, si tu decisión es firme, llamarás a las puertas del cielo.
Y sabeis una cosa, estoy feliz...pese a todo solo puedo que estár feliz, pese a que siento incomprensión de algunas personas...yo me intento centrar en comprenderlas a ellas, pese a que veo ante mi toda la escalera por recorrer, al menos ahora se a donde me lleva y que errores no debo cometer...pese a todo...se que tras la puerta del cielo existo yo, mi esencia, mi alma...mi espiritu libre de todo aquello que no es.
Aun hay una cosa que, por yo mismo haber vivido, puedo ver que no funciona. Imaginaos que estais andando por un camino, un bosque o lo que querais, de pronto aparece ante vosotros un tigre, un oso u otra especie que os parezca bien. Cuando estás frente a el puedes actuar con miedo y salir huyendo, puedes intentar espantarlo con agresividad, o puedes optar por mantenerte calmado, en silencio, concentrado en la paz y el amor que puedas transmitir...sin duda son animales fieros, pero con tu actitud puedes hacerle brotar esa fiereza o transmitirle paz y que no sienta una amenaza en ti...¿cual seria la mejor opción?.
Con esto quiero decir que todos tenemos, al menos aquí y de momento, ese mismo instinto, porque hemos venido a liberarnos de el o lo que sea, vemos algo en alguien, una actitud, una palabra, una respuesta...e inmediatamente nos molesta, nos inquieta...y la mejor forma de ayudar a ese alguien a que se centre en el amor, que no se pierda tras las puertas oscuras, no deberia ser provocandolo, haciendoselo brotar. Si esa persona decide eliminar esa parte de si mismo, el será quien deba verrlo y reconocerlo, una ayuda de corazón solo puede venir desde el amor y la comprensión. Puedes ayudar desde tu paz interior, que el o ella pueda sentirlo y decida buscar dentro de sí ese estar. No se puede educar a un niño en el amor si le ofreces desamor. Se dijo "dejad que los niños se acerquen a mi",y me parece que se refiere que para acercarnos a nuestro cielo interno debemos ser esos niños libres de juicios, reproches, patrones y demas...despues de todo así es como vinimos aquí...y puede que la manera mas efectiva de llegar a ello sea trabajando cada uno en si mismo, buscando lo mejor dentro de sí y ofreciendoselo a los demas, alimentandose unos a otros, nutriendose de amor...no de rechazo. Está claro que puedes hacerle ver a alguien aquello que a el mismo no le es beneficioso, pero debes ser cauto y distinguir entre si estás siendo neutral y lo ayudas, o se lo estás alimentando...el limite entre una cosa y otra es muy fino...seamos cautos y estemos alerta de nuestros actos.
Con esto me viene decir que, como a todos nos pasa alguna vez, no nos dejemos retener por las adversidades que puedan aparecer detras de ciertas puertas, simplemente cuando lo veamos intentemos actuar con amor, lo perdonemos y no le demos mas importancia, pues eso solo lleva a darle mas poder a la situación, sentimiento, o lo que sea ese obstaculo, ya sea para nosotros o para los demas. Aquellos que sean capaces de perdonar esas ilusiones y no depositar un gramo de su energia en ellas....seguro se acercarán mas y mas a la puerta del cielo, a su corazón. Hay que saber distinguir entre perdonarlas y dejarlas ir, o actuar bloqueandolas...mucho cuidado en esto pues bloquearlas nos hará mas daño.
Y si por algun motivo no te sientes con fuerza para seguir adelante cuando un obstaculo se te presente, preguntate si no estarás siguiendo un camino equivocado, despues de todo...en el camino del amor todo debe ser facil y agradecido.
Vale....solo una cosa mas....si decides que quieres llamar a la puerta de tu corazón, nunca lo hagas porque crees que puede ser bueno para algo o alguien que no seas tu, recorre esa escalera recogiendo los regalos que te hacen a ti...solo para ti...porque esa es la manera de que tu avanzes y todo a tu alrededor se transforme en un sinfin de pequeños milagros que... ahora si...llegarán a todo el mundo.
El libre albedrio....haz lo que creas oportuno...pero mira siempre de que sea lo correcto y no perjudiques a nadie...bastante tiene cada uno con lo suyo.
Cada dia es un paso mas...hacia ti.
